Para cualquier persona que busca alguna terapia conversacional para entender y resolver sus problemas, es muy importante encontrar al terapeuta correcto. Este tiene que dar a esa persona confianza para explorar su mundo interior.
Aunque a simple vista parecería que es más útil un terapeuta con muchas credenciales, no cabe duda de que lo más importante no es la cantidad de diplomas que haya alcanzado sino la calidad de terapia que ofrece, es decir, la calidez, empatía, amor y cuidado que ofrece.
Como pacientes, en muchas ocasiones resulta doloroso hablar de experiencias vividas y las acciones y decisiones que tomamos, por tanto, ir a terapia es un acto de amor propio en el que se requiere mucha valentía y coraje para aceptar abrir la caja de pandora y ver lo que esconde.
En mi experiencia creo que en general hay dos tipos de pacientes, el que ante una crisis desea solucionar el síntoma y el que ante una crisis o no, desea solucionar de raíz sus conflictos, conocerse y fortalecerse. Para ambos y sobre todo para el segundo, la terapia deberá ser un espacio de seguridad en donde pueda expresar sin juicio ni crítica todo lo que lleva dentro, un espacio en donde se sienta escuchado y comprendido, y, ante todo, donde su Ser se sienta reconocido.
Lo anterior es vital para que el paciente pueda descubrir quién es realmente y cómo llegar a si mismo fuera de condicionamientos y miedos.
Todos somos diferentes, únicos y un espacio seguro nos permite ver nuestra singularidad sin miedo y de esta forma conectar con ella y desplegar nuestros dones y talentos. ¿Y la sombra? Reconocerla sin juicio y hacerla una poderosa aliada.
Ciertamente en cualquier terapia física o mental/emocional la seguridad del paciente es primordial, pero también es cierto que en una terapia conversacional es muy importante que el paciente sea validado y comprendido, y luego animado a avanzar. La terapia no debe ser un lugar para la victimización, sino para la acción compasiva en la cual el paciente recupera o desarrolla su propio poder, su capacidad para resolver situaciones de vida con consciencia y avanza hacia sus sueños y metas.
Para mi es un honor y una responsabilidad acompañar a mis pacientes en su camino hacia el bienestar, y me siento muy feliz cuando veo el compromiso hacia ellos mismos y el avance en su vida. Gracias a todos ellos por permitirme ser parte de su sanación.
05/12/2024