Comenzar el camino del Reiki puede ser muy fácil para algunas personas y no tan sencillo para otras.
Como cualquier trabajo personal, asusta a algunos por las emociones que suponemos pueden surgir.
Y si, pueden surgir e incomodarnos.
Sin embargo, el asombro, la alegría, el compromiso personal y el amor que se vive en el camino Reiki es más poderoso.
Y una vez iniciado el camino, nos sentimos más valientes, más conectados y más amados.
Vale la pena, ¿no crees?